Los proyectos e iniciativas nacen directamente de la enseñanza de Caty Marí y de la práctica del Punto Can-Pal (materia y espíritu trabajando unidos), una vía de autoconocimiento que despierta la memoria, la voluntad y la energía de creación de formas de vida que proceden de la toma de conciencia. Estos principios, transmitidos a lo largo de los años, han dado lugar a propuestas concretas que trascienden lo individual y sirven al bien común.
Desde el Yoga Punto Can-Pal, creado por Patricia Marí en Ibiza como forma de integrar esta enseñanza en el cuerpo y la vida cotidiana, hasta programas en la educación nacional que ayudan a niños y profesores a vivir con más equilibrio y conciencia, cada iniciativa refleja cómo un conocimiento de sí mismo puede convertirse en una acción transformadora.
También se desarrollan proyectos sin ánimo de lucro en el ámbito medioambiental, así como espacios culturales y espirituales como la Danza por la Paz Mundial o el programa digital Caminos de Paz, que reúnen a personas con intereses comunes que alzan su voz para mejorar el sistema de vida actual.
Todas estas iniciativas comparten un mismo propósito: sembrar paz, cuidado y conciencia en la sociedad, y mostrar que la enseñanza del Punto Can-Pal no es solo una filosofía, sino una herramienta viva que genera impacto positivo.